El impacto de las nuevas tecnologías y las redes sociales en los procesos de selección y generación de marca es innegable en las organizaciones. El estudio talento conectado , liderado por EY y realizado junto a Infoempleo, señala cuáles son las claves para diseñar y transformar digitalmente los procesos de adquisición de talento focalizados en la mejora de la experiencia del candidato. La nueva guerra por el talento digital, el cambio hacia organizaciones ágiles y los nuevos modelos de colaboración con los empleados son cuestiones que generan un interesante debate y, sin duda, algunos de los retos más relevantes para los departamentos de Recursos Humanos. La misión tradicional de “atraer y retener talento” se transforma y se convierte en una nueva máxima: “atraer, conectar e ilusionar a las personas”.
El estudio revela que los nuevos profesionales desean enviar de forma rápida su candidatura (el 80% utiliza smartphones para ello) y se convierten en detractores de la marca, incluso como consumidores, si tienen una mala experiencia durante un proceso de reclutamiento.
El empleado del futuro muestra cada vez más motivación por la movilidad profesional, por un proyecto de carrera basado en experiencias y proyectos, y por entornos que les permitan desarrollar las capacidades más demandadas en el mercado. En definitiva, el talento busca y necesita fórmulas flexibles de trabajo y colaboración con las empresas.
En este sentido, redes de reclutamiento y opinión que permiten incorporar la voz del empleado son cada vez más utilizadas y valoradas por conocer los resultados del proceso de selección. La transparencia en la información y la comunicación bidireccional se convierten en un imperativo, convirtiéndose en parte de la propuesta de valor de las empresas para atraer el talento. Por esta razón, estamos viviendo progresivamente cómo las grandes compañías ponen más foco y recursos en el diseño de experiencias de reclutamiento.
El talento externo o “contingente” adquiere también más fuerza en las fórmulas de colaboración preferidas por las organizaciones impactando directamente en las agendas de los CEOs. Muchas organizaciones esperan incrementar la colaboración de esta forma de talento emergente a corto plazo, lo cual implica un cambio de paradigma y de estrategia para la gestión de la fuerza laboral.
El concepto de talento conectado se amplía y se transforma, y las empresas necesitan modelos y herramientas para su gestión. Las plataformas tecnológicas se convierten en el punto de encuentro bajo modelos de relación tipo Marketplace, ya que supone una nueva oportunidad para gestionar la experiencia de empleado externo, publicando proyectos relevantes, capacidades, dedicaciones requeridas e incorporando soluciones para el on-boarding efectivo de proyectos.
En este contexto y bajo las conclusiones del estudio, el número de empresas que están digitalizando el proceso de captación de talento aumenta significativamente. Sin embargo, la falta de información sobre las innovaciones tecnológicas existentes en Recursos Humanos y la falta de priorización por la alta dirección serán algunas de las principales barreras a vencer, según señalan los expertos en talento de las compañías.
La vigilancia tecnológica de nuevas soluciones en el panorama de los RRHH se convertirá en una capacidad crítica para las compañías. Las herramientas tradicionales para conocer el perfil de las personas y evaluar las competencias de las mismas se han digitalizado y están consolidadas. Soluciones tan conocidas como videoentrevistas o los test on-line siguen siendo los recursos más utilizados por muchas de las compañías por su coste y facilidad de aplicación. El nivel de adopción por parte de los candidatos es alto y su percepción es positiva, pero el mercado digital va más allá. Empieza a demandar nuevas soluciones, tales como la realidad virtual, que está ganando un peso relevante para los candidatos. Éstos valoran cada vez más las experiencias inmersivas en su proceso de reclutamiento, alineadas con su estilo de vida, valores y capacidades profesionales.
Soluciones, como los Chatboot, que permitan dar información rápida a las personas sobre la compañía, su cultura, las características de un puesto o las vacantes actuales; o robots de gestión que permiten pequeñas innovaciones como agendar entrevistas sin intervención humana con candidatos que optan a puestos críticos permiten a los profesionales de recursos humanos dedicar su tiempo a desarrollar tareas de más valor: conocer, conectar e ilusionar a las personas.
Existen infinidad de soluciones de reclutamiento y evaluación, de bajo coste y alto impacto, que no se conocen, tal y como pone de manifiesto el estudio, y las empresas no están adoptando. Herramientas de autoevaluación abiertas a todo el mundo son, por ejemplo, altamente demandadas por los candidatos y pocas compañías las tienen en su portfolio de soluciones. Y son precisamente estas soluciones las que tarde o temprano cambiarán las reglas del mercado de trabajo.
Ante esta nueva realidad, las compañías deben prepararse e iniciar la propia transformación de su función de Recursos Humanos para dar respuestas a nuevas formas de captar el talento, trabajando bajo paradigmas ágiles y desde una perspectiva multidisciplinar. Los equipos de RRHH de compañías de diferente naturaleza y magnitud, desde start up a grandes multinacionales, trabajan ya bajo metodologías modernas como scrum o kanban. El protagonismo de estos equipos es y será cada vez mayor en organizaciones diseñadas para trabajar por proyecto.
En definitiva, la digitalización progresiva de los procesos de captación de talento, la individualización de la experiencia del candidato y la permanente incorporación de innovaciones en los procesos de evaluación se convierten en los pilares de un Talento Conectado que se reinventa de forma exponencial cada día.